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Actualmente sigue sin existir una evidencia científica, pero si es cierto que odontólogos y farmacéuticos nos encontramos cada vez más gente con molestias y/o infecciones en su boca, o con problemas de halitosis.
¿Por qué sucede esto?
Porque nuestra boca está viva y funciona como un ecosistema, con su propia flora bacteriana que es, en gran parte, la encargada de nuestra salud. Funciona como barrera, pero una mala higiene puede perjudicar nuestra salud.
Sucede que hay ciertos procesos naturales dentro de nuestra boca que necesitan aire exterior y oxígeno y que bebamos mucha agua. Al llevar las mascarillas, el comportamiento de muchas personas cambia: mantienen la boca cerrada por tiempos más prolongados, beben menos agua… y eso sin tener en cuenta que no respetar el ciclo útil de la mascarilla expone toda la suciedad acumulada en el tejido sobre la boca directamente durante mucho tiempo. Todo ello favorece la proliferación de bacterias que pueden provocar caries, gingivitis u otras patologías bucodentales.
¿Cómo se originan los problemas en la boca?
Estos problemas pueden originarse en pacientes con las defensas más bajas. Lo que sucede es que las bacterias saprófitas, que no habitan de forma natural en nuestra cavidad bucal, aprovechan cuando las defensas bajas para hacer de las suyas: se multiplican con la falta de aire o agua (por eso es importante beber agua y lavarse los dientes al levantarse por las mañanas), y pueden provocar la aparición de caries, halitosis, gingivitis o incluso manchas oscuras en los dientes.
Otro factor determinante en nuestra salud bucodentales la dieta, que ha empeorado desde los tiempos del confinamiento. Según un estudio reciente, además de comer alimentos con más azúcar, comemos entre horas y con mayor frecuencia.
Lo que debemos hacer para solucionar todos estos problemas empieza por soluciones muy básicas: beber agua con frecuencia,evitar bebidas azucaradas ¡y aguantarse las ganas de picar entre horas! De este modo, podemos mantener los niveles de salivaque nuestra boca necesita.
Y… ¿qué más? Pues teniendo en cuenta que la mascarilla es obligatoria, llevarla limpia o nueva siempre. No es recomendable llevar la misma mascarilla más de 4 horas seguidas. Si usas reutilizables, lo idóneo sería cambiarla dos veces en un mismo día.
También puedes respaldar la higiene de tu boca con colutorios. El uso de pastas y colutorios con principios activos antisépticos ayudan a controlar los microorganismos de la cavidad bucal. Desde Farmacia Gran Vía te recomendamos usar el CPC Vitis, que además reduce la carga viral dentro de tu boca. Es una buena solución para prevenir otras enfermedades.
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